Por su parte, leer esto Carlos Gutiérrez, nutricionista de perros, defiende que “que la alimentación natural marcha en el noventa y nueve por cien de los casos, y los animales cambian radicalmente su aspecto, siendo mucho más fuertes y enérgicos. En 3 o 4 minutos das de comer a tu can –yo enseño como hacerlo–, y si no puedes dedicarle este tiempo a tu animal, mejor que no lo tengas. Los casos de descalabro que tengo es en los perros que no aceptan otra cosa que no sea pienso por una intolerancia alimentaria, perros que solo pueden comer proteína hidrolizada”. Da lo mismo si los nutrientes enunciados más arriba se presentan en forma de pienso, comida húmeda o cruda, es una simple cuestión de gusto. Muchos dueños se aferran al procedimiento de nutrición a base de comida ya preparada debido a la falta de tiempo, inseguridad o por comodidad. Mas deja de preocuparte, puesto que solo con el pienso o el alimento húmeda le vas a estar aportando todos y cada uno de los nutrientes esenciales que tu cánido necesita. Sin embargo, deberás prestar atención a los diferentes índices caloríficos de cada género de alimento.
Otro procedimiento reciente de alimentación es el denominado BARF o ACBA (Alimentación Cruda Biológicamente Adecuada), la que gana popularidad entre los criadores, veterinarios y dueños de perros. En un caso así este consumo adecuado de carne cruda es tan elevado como el de los lobos y el de los primeros perros que se empleaban para el pastoreo o como guardianes en las granjas. Por tal razón esta clase de alimentación no debe tener ninguna complicación, como se sugiere en las tablas nutricionales detalladas. Si decides suministrar a tu can una dieta basada en un 70 por ciento de carne cruda y un treinta por ciento de verduras frescas, ya vas a tener pensado el menú diario equilibrado para día a día. De forma que, ¿cuál es la mejor nutrición para tu can adulto?
Si se opta por esta opción, el consejo es no mezclar el alimento casero con el comercial y, recordar, afirman los especialistas, que los ingredientes no procesados son caducos. En ambos animales, depende de la edad, el peso, la raza y del ejercicio que hace. Por eso, hay que mirarlo en el envase del pienso, donde se señala precisamente lo que debe comer cada animal. Como regla general, a los perros se les acostumbra a dar de comer una o un par de veces al día. En cambio, los gatos regulan realmente bien la ingesta de alimentos y comen varias veces durante el día y la noche. Los perros comen con voracidad al tiempo que los felinos, al ser cazadores solitarios y de presas pequeñas como ratones, comen poco a poco. Por otro lado, va a haber que adquirir el pienso conveniente según sea cachorro, adulto o senior.
Por suerte cada vez existen más dueños de perros y gatos que optan por nutrir a sus animales con dietas naturales, basadas en carne, huesos sustanciosos, órganos, vegetales, etc. Esto es lo que es conocido como dieta BARF,o en castellano ACBA (Nutrición Cruda Biológicamente Apropiada). Existen algunos animales que no aceptan bien la alimentación industrial o bien que rechazan sistemáticamente los piensos. En estos casos los ingredientes naturales pueden ser una buena opción alternativa. También pueden serlo en casos de perros y gatos que sufren determinadas nosologías.
Esta pregunta no se puede contestar de forma tan general, puesto que no todos los perros son iguales. En dependencia de sus dimensiones corporales, edad, salud, peso y nivel de actividad física, las necesidades alimentarias cambiarán, con lo que está en tus manos determinar qué comestible es el más apropiado. Después de todo no solamente se van a deber tomar en consideración las demandas concretas de tu mascota, sino asimismo si tu estilo de vida se podrá adaptar al género de comida que necesite. Aquello que es práctico para algunos en el cada día, para otros es un enorme reto. El coste, los valores de referencia de los comestibles y el tiempo desempeñan, indudablemente, un papel determinante en el momento de decidir qué género de nutrición es la mejor. Es importante que, una vez decidido el procedimiento que le vaya bien a tu cánido, se lo puedas dirigir en un largo plazo. Los cambios frecuentes del tipo de comida fatigan al organismo del animal, los cuales pueden causar diarrea, gases y otros inconvenientes digestivos.
Mientras que arroz o verduras, en general no van a hacer daño al animal. Hay alimentos como los dulces, los productos excesivamente salados o algunas frutas que pueden ser perjudiciales. Pasa también con los huesos de pollo, que pueden provocarles atragantamientos e incluso la muerte.
Gutiérrez es un ferviente defensor de la nutrición casera y ofrece asesoramiento en su centro de nutrición en la villa de Madrid y mostrando casos de éxito en su bloc. “No es nada sano alimentar a un cánido con pienso por más que se venda como un producto con alta proteína de origen animal. Son bolas secas que no se echan a perder, es una dieta súper industrializada; no tiene ninguna lógica. No he encontrado a nadie, ni a ningún veterinario, que me afirme que alimentaría así a sus hijos, con una bola súper procesada que no se echa a perder y está deshidratada; es atroz. Lo más sano son cosas de casa, naturales y, sobre todo, altas en proteína animal; eso les viene de mucho lujo a los perros”, enfatiza.
Por servirnos de un ejemplo, el pienso, debido a su bajo contenido de agua, se encuentra cinco veces más concentrado que exactamente la misma cantidad de comida húmeda. De forma que, con una menor ración, se nutre de igual modo que con otra más grande de comida húmeda. En lo que respecta a la comida húmeda, se debe tener en cuenta que a menudo tiene un alto contenido proteico.